Un cerdito muy simpático

Ya sabéis que este baúl tiene un rincón para los más pequeños, y más cuando me encanta hacer cosas con mi sobrina para que disfrute cada momento que pase conmigo.

¿Qué es lo que se me ocurrió esta vez? Seguro que nunca os habéis imaginado que con un tubo de cartón de papel higiénico, una huevera de cartón y tapones de corcho, sale un cerdito muy simpático. Yo os digo que es posible, ¿magia? ¿ilusión? ¿imposible?... Tranquilos, tranquilos.... Yo os aseguro que es posible, ¿cómo? Pues coged lápiz y papel y... muy atentos que es muy fácil.

Antes de indicaros los materiales que se necesitan y los pasos a seguir, os hago una recomendación: imprescindible la ayuda de los peques, será más divertido. Yo, por supuesto, tuve la ayuda de mi peque preferida, mi reina Nuria.

Materiales:

• Tubo de cartón de papel higiénico.
• Huevera de cartón.
• 4 tapones de corcho pequeños.
• Pintura plástica rosada (tempera).
• Pintura blanca y negra (tempera).
• Pincel.
• Cola blanca.
• Tijeras.

Pasos:

1º PASO: Para la cabeza, recorta un cuenco de la huevera y deja dos solapas que serán las orejas.

2º PASO: Pinta de color rosa el tubo de papel higiénico, el cuenco de la huevera y los 4 tapones de corcho. Dejar secar. En el caso de que no tengas color rosa, ya sabes que puedes hacerlo mezclando rojo y blanco. De esta forma aprovechas y enseñas al peque de dónde viene el color rosa. Mi sobrina se quedó alucinada cuando vio como iba apareciendo el color.


3º PASO: Pega la cabeza al tubo de papel higiénico.

4º PASO: Para las patas, pega al tubo los tapones de corcho y una tira de cartón de la huevera que será la colita.

5º PASO: Por útlimo, píntale los ojos, la nariz y la boca.

Y aquí tenemos a un cerdito muy simpático.

A que no es tan difícil. A los más peques les encantará participar y se lo pasarán muy bien.

Y, por último, os dejo un cuento:

Como habéis deducido este post va dedicado a los más pequeños... y, por qué no, también para aquel rinconcito infantil que tenemos tan escondido.

Mamen